viernes, 30 de abril de 2010

*** Bud

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Bud era un tipo grande
Estacionaba el camión en la avenida
Y saludaba a mamá levantándola por la cintura
Luego le daba una palmada en las nalgas
Y me enviaban a jugar fuera

Pero afuera nunca había nada excepto yo
Lo que no hacía excepción alguna
Eso y el sol que daba sobre el cemento partido
Calentando el suelo como si por las mismas grietas
Pasase el calor a esconderse debajo

Bud decía que mi madre tenía un buen culo
Y ella reía como si aquellas palabras hubiesen sido flores
Que Bud depositase en un culo que pasaba ahora también a ser florero

¿Ves ese perro? Dijo Bud un día
Yo estaba sentado en la cuneta mirándome los pies
Te doy cinco dólares si impides que meta su hocico en la basura
Yo miré al perro y la basura amontonada al otro extremo de la calle
Y pensé en esos cinco dólares que nunca había tenido
Luego miré el torso desnudo de Bud y la manera en que tenía agarrada a mamá

Vale, le dije. Y fui hasta la cuneta más cercana a la basura
Que quedó entonces amontonada a mis espaldas

Apenas quedé solo en la calle
El perro comenzó a acercarse
Yo busqué algunas piedras y esperé

El animal tenía poco pelo y una pata torcida
Pero yo también estaba a mal traer y tenía apenas cinco años
Por lo que podía considerarse una pelea justa

Entonces
Como si el sol bajo el suelo volviese arriba de golpe
Descubrí que no estaba solo en medio de la calle
Y como estaba a mal traer y tenía apenas cinco años
Terminé correteando tras el perro de una cuneta a otra
Escuchando apenas los gritos que salían de mi casa
Y corriendo sin parar hasta que los vidrios se esparcieron por la calle

Bud se encontraba ahora fuera de casa
Había una ventana rota y mi madre estaba en la puerta
Vestía una camiseta blanca que estaba un poco sucia
Y unos pantalones cortos que apenas se veían por debajo la polera

Recuerdo que los pies de mamá estaban muy cerca de pisar los vidrios
Y que hubo un momento de silencio

Quiero mis cinco dólares. Le dije entonces a Bud
Él se volteó hacia mí
Fue entonces que el perro le ladró
Y hasta intentó morderlo cuando me vio caer al suelo después de recibir el golpe

¡No te doy cinco dólares para que juegues con esa mierda! Gritó
Mientras le lanzaba un puntapié al perro
Luego gritó mamá y comenzaron a verse por las ventanas los rostros de los vecinos
Para ese entonces mamá ya había pisado los vidrios
Y avanzaba tras de Bud quien estaba subiendo a su camión

Unos segundos después se encendió el motor
Y fue como si una voz enorme hubiese hablado para que todos guardasen silencio

Mamá había quedado como una estatua
Con la vista fija en el camión y yo unos pasos tras ella
Mirando los trozos de vidrio enterrados en la piel
Observando la sangre manchar el pavimento

Recuerdo que me acerqué hasta ella
Pensando si ayudarle o no a sanarse los pies
Hasta que ella se volteó de pronto y me llevó en andas a la casa

Esa noche
Después de comer
Pusimos un cartón grueso en la ventana rota
Y esperamos

Cuando no hubo ninguna luz en la calle
Ella me dijo que debía buscarle un nombre al perro
Y me besó

Luego salió por última vez fuera
Y desparramó como una loca silenciosa la basura por la calle

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