lunes, 2 de junio de 2014

Es porque yo los oigo.


A veces pienso que es porque yo los oigo, que ellos se ponen a hablar… Claro que nadie me cree. Por ejemplo, ahora dicen que estoy sentado frente a un computador escribiendo justamente eso… ¿Se imaginan? ¡Qué manera de hablar cosas sin sentido…! ¡Qué manera de perder el tiempo…! Yo creo que lo hacen por joder, por probarse unos a otros que pueden ser ingeniosos y construir algo así como el sentido de un otro… ¡Cuánta pretensión! Si simplemente apilan palabras como si fuesen… eh, no sé… palabras, quizá, justamente... o hasta piedras. ¿Han pensado para qué la gente apila piedras…? ¿Se han puesto a pensar para qué las cambian de lugar? Pues yo lo he pensado y creo que lo hacen por joder, sinceramente. Y que hasta viven meramente por joder, ya que estamos. Sin exagerar: viven meramente por joder. La primera vez que concluí esto estaba yo dando un examen de latín III… No sabía una mierda. Y claro, fue entonces que los escuché hablar. Discutían acerca del latín y otras lenguas muertas. No eran interesantes sus argumentos, pero recuerdo que me entristecí pensando que ahí estaba yo, a mis 19 años, frente a un examen sobre una lengua muerta. Desde entonces, los escucho hablar de vez en cuando… Aunque claro, no entiendo sus razones. A veces pienso que es solo porque yo los oigo, que ellos se ponen a hablar… Claro que nadie me cree. Por ejemplo, ahora dicen que estoy sentado frente a un computador escribiendo justamente esto… ¿Se imaginan? ¡Qué manera de hablar cosas sin sentido…! ¡Qué manera de perder el tiempo…! ¡Cuánta pretensión…!

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