miércoles, 20 de enero de 2021

Figuras de cartón.


I. 

Hacías figuras de cartón. 

Figuras con forma humana. 

Buscabas modelos en fotos y revistas. 

Luego proyectabas. 

Con cuidado cortabas sus bordes. 

No aceptabas fallas. 

Te gustaba reforzarlas hasta que podían mantenerse de pie. 

Solo entonces te sentías orgulloso. 

Las observabas. 

Las ponías frente a ti. 

Ya terminada, comenzabas otra. 

Todo lo demás, carecía de sentido. 


II. 

Puestas así, sobre el escritorio, 
o sobre el piso, 
las figuras fueron cubriendo cada vez 
mayor espacio. 

Algunas, incluso, 
comenzaron a reunirse con otras. 

Tenían trajes afines, 
tamaño, 
o hasta actitudes 
que te obligaban a ponerlas así, 
unas junto a otras. 

Mejoraste tu técnica, con el tiempo, 
aunque te negaste a retocar 
a las primeras. 

Sus errores les pertenecían. 

No te sentiste con derecho 
a transformarlas. 


III. 

Como eran planas, sin embargo. 

Rígidas. 

Debías cuidar su posición. 

Me refiero a que no podías ponerlas en un ángulo 
que delatara su falta de volumen. 

Además, por atrás no eran figuras. 

No estaban pintadas, por ese lado. 

Eran solo trozos de cartón 
y soportes 
para mantenerlos verticales. 

Para alguien que las viera 
desde esa posición, 
al menos, 
eso es 
lo que habrían sido. 


IV. 

Con el pasar del tiempo 
las fuiste guardando en cajas. 

Ya no había espacio 
para mantenerlas de pie. 

Aun así, 
cuando terminaste la última, 
pusiste los cientos de figuras sobre el piso 
y te dedicaste a observarlas 
por última vez. 

Cada figura, pensabas, 
había encontrado su lugar perfecto. 

Dentro de ellas, incluso, 
te pareció que algo 
había encontrado su lugar. 

No las fotografiaste. 

No se las mostraste a nadie. 

Solo volviste a guardarlas. 

En grupos que amarraste con cáñamo, 
sin saber por qué. 

Cuando recuerdas todo aquello, 
hoy en día, 
te asustas un poco de ti mismo, 
y si te preguntan entonces en qué piensas, 
dices que estás pensando en nada 
o en otra cosa. 

Y tu corazón late más rápido. 

Y no sabes por qué.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores

Archivo del blog

Datos personales