J. tiene una expresión afligida. Se ha juntado con
F., su amigo, tras llamarlo en medio de la noche un día cualquiera. J. y F. no
se veían hacía varios años.
Esta es una versión un tanto resumida de lo que
hablaron en su encuentro.
Primero habla J., luego F.
-¿Querías verme?
-Sí…
-¿Qué pasa…? ¿Algún problema?
-Sí, varios… pensé que podías ayudarme…
-Mira, si es por dinero estoy re complicado, yo…
-No, no se trata de eso… es que he tenido problemas
de ánimo… o sea, ya sabes… típicas preguntas sobre el sentido de las cosas y…
-Espera… ¿Me buscas a mí para eso?
-Sí.
-¿Y por qué a mí?
-Bueno, ya sabes… tú atiendes pacientes, cierto…
pensé que podrías ayudarme…
-Pero soy dentista, hueón.
-¿Dentista?
-Sí…
-Chucha, me confundí.
-…
-Bueno, pero igual atiendes pacientes, ¿no?
-Sí, pero…
-Y además ves bocas todo el tiempo… y mi problema
es con las palabras, después de todo… ¿Y es de la boca de donde salen las
palabras, no es así…?
-No creo…
-¿Qué cosa?
-Que tengan que ver… las palabras vienen de más
adentro.
-Pero el sabor se siente en la boca.
-¿Qué sabor?
-El de las palabras… o sea, ese es mi problema, en
concreto… o se traduce en eso, al menos, si quieres…
-¿Tu problema se traduce en el sabor de las
palabras?
-Sí, más o menos… o sea, en cierto sabor
desagradable que dejan algunas palabras cuando las digo…
-¿Qué palabras?
-Palabras po, hueón… en general… pero sobre todo
algunos nombres, algunas sensaciones incluso, cuando quiero nombrarlas…
-Estás mal, hueón…
-Tú ves bocas todo el tiempo, cierto… O sea, me
refiero a que exploras el agujero ese por donde salen las palabras y…
-No exploro… trabajo con los dientes, nada más…
-Sí, pero…
-No sigas, hueón… no puedo ayudarte… nunca pude, de
hecho…
-Pero si nunca te pedí ayuda antes.
-Siempre lo hacías. Venías con M. todo el tiempo… ella
no lo pasó bien en ese tiempo… ¿acaso no recuerdas?
-Recuerdo, pero eso no te da derecho a haberme
quitado a M.
-Así que ese es el punto.
-...
-Escucha: no te quité a M. Simplemente pasó que ella te dejó
y meses después comenzamos a salir, nada más…
-¿Está contigo?
-Sí.
-...
-Vivimos juntos hace un par de años.
-¿Ella está bien?
-Sí… estamos bien.
-…
-…
-No le digas que hablamos, ¿de acuerdo?
-No. No voy a decirle.
-Gracias.
-Sabes… tengo un amigo siquiatra, quizá el…
-No. No hay cuidado. Preocúpate de ella, no más…
aunque sea de sus dientes…
-…
-No le digas que hablamos, acuérdate…
-Ok. No le digo.
-Hasta pronto, entonces.
-Ok. Hasta pronto.
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