martes, 2 de noviembre de 2021

Nadie tiene razón.


Nadie tiene razón.

No le demos vueltas.

Hagámosla corta, como dicen.

Lo importante es que no dudes.

Insistirán algunos, por supuesto.

Alzarán sus voces.

Buscarán situarse en un lugar alto.

Gritarán incluso, pero no hagas caso.

Ocúpate únicamente de ser sensato.

No hagas caso a sus llamados.

Que no te afecten sus ofensas.

Su lógica está en el aire, sin sustento alguno.

Igual que nuestro planeta, si lo piensas.

Que no te confundan las falsas explicaciones.

No hagas caso.

Solo recuerda estas palabras.

Nadie tiene razón.

Ni los vivos ni los muertos, la tienen.

Ni los que aun no han nacido, la tendrán.

Todos hablan sin saber.

Sin creer, incluso.

Todos hacen ruido como máquinas que no tienen fin alguno.

Ese es el ruido de todos.

Ondas de estática.

Chirridos de cuerpos que se enroscan contra sí mismos.

Ese es el sonido de la sinrazón.

Llantos de algunos apenas llegan al mundo.

Llantos de otros porque alguien se va.

Gritos de dolor ante la nada más fría.

No pierdas tiempo con eso.

La cuestión es simple.

Nadie tiene razón.

Ni tú ni yo la tenemos.

La razón misma es un invento.

Un puente a medio hacer para atravesar un vacío.

No encontrarás caminos mientras te pares frente a él.

Mientras esperes algo que nadie ha prometido.

No le des más vueltas y repite conmigo, como un mantra.

Nadie tiene razón.

Nadie tiene razón.

Nadie tiene razón.

Hagámosla corta, como dicen.

Siente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores

Archivo del blog

Datos personales