lunes, 11 de mayo de 2020

La hora en que duermen los niños.


Ellos estaban ahí
en un mismo espacio
haciendo distintas cosas
mientras hablaban sobre la hora
en que debían acostarse los niños.

Él lavaba unos platos
y ella guardaba unas cosas
que los niños habían dejado dispersas
en el comedor.

Era una conversación normal,
aunque no llegaban a acuerdo
pues ambos manejaban informaciones distintas
sobre las horas al día que los niños
necesitaban dormir.

Tras terminar lo que estaban haciendo
buscaron con Google
y encontraron también
información contradictoria.

Por lo mismo terminaron por buscar un rango medio
entre las distintas propuestas.

Tras establecer el acuerdo,
quedaron de informarles a los niños
a primera hora
y ser muy estrictos al plantearlo
para que aquello
no se prestase a discusión.

Él entonces revisó las ventanas
conectó la alarma
y miró hacia el sector donde el auto
se encontraba estacionado,
como hacía cada noche.

Ella, en tanto, estaba en el baño,
lavándose los dientes
y cepillándose el pelo,
como hacía siempre
antes de ir a acostarse.

Siguieron así con los últimos rituales
(él prefería ducharse en la noche,
ella en la mañana),
y por una casualidad,
ambos volvieron a encontrarse en la cocina
con los pijamas puestos.

Él había entrado a buscar su celular
y ella recordó que debía dejar un trozo de carne
fuera del freezer.

Como terminaron al mismo tiempo
fueron juntos hasta el dormitorio,
y recordaron el horario en que,
desde mañana,
debían acostarse los niños.

Segundos después,
se metieron en la habitación
y cerraron la puerta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores

Archivo del blog

Datos personales