Ojos como ceros.
No se ordenan las palabras.
Digamos que es algo que comí.
Sin un solo pensamiento en la cabeza.
Esperamos en el primer hogar.
Tratando de decidir.
Tratando de decidir si la mujer era bonita.
¡Qué importa!
Ceros como ojos.
Esperar junto a la puerta.
Digamos que es algo que bebí.
¿Dónde está aquel que dijo que vendría?
Olvidamos el primer hogar.
Tratando de decidir.
Tratando de decidir si era aquel el sentimiento adecuado.
¡Qué importa!
No se ordenan las palabras.
Los ladrillos se rechazan como imanes de polos similares.
¿Esa puerta que veo es la de salida?
Ojos como ceros.
¿Dónde están aquellos que dijeron no se irían?
Digamos que es algo que viví.
Ceros como ojos.
Ventanas empañadas en una casa vacía.
No se observan las palabras.
Regresamos al primer hogar.
Tratando de decidir.
Tratando de decidir si lo vivido fue siempre lo correcto.
¡Qué importa!
Digamos que es algo que olvidé vivir.
Paisajes que no vi.
¿Esa puerta que veo es la de salida?
Ojos como ceros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario