miércoles, 8 de julio de 2020

Algo que no es simple.

“Yo voy a darte mi secreto mortal:
Vivir no es un arte”
C. L.

Ocurre que intentamos describir con sencillez,
día a día,
algo que no es simple.

Eso es lo que ocurre.

Nos esforzamos por hablar
sobre cosas sin apariencia,
e ideamos intrincadas definiciones
para cosas que no son.

Ansiamos agrupar todo
en categorías ordinarias,
y llenamos los cajones hasta el borde
de ropa que no usamos,
o que, peor aún,
no corresponden,
necesariamente,
a esa categoría.

Durante el día, entonces,
se caen de nosotros
esas ropas que no son.

Así,
avergonzados de nuestra torpeza
sonreímos,
tratando de explicar
en vez de comprender.

Las cosas están en su lugar en la cocina,
te dices, por ejemplo.

Y ciertas cosas parecen explicarse,
justamente,
de esa forma.

¿De verdad crees que es buena idea
que te diga lo que pienso?

Pues bien:

Pienso que observas como si observaras lenguaje.

Y pienso que vivir se transforma,
de esta forma,
en repetir un mantra equivocado.

Nos despojamos del día
como de una piel muerta.

Pero olvidamos que vuelve a brotar la misma piel
cuando no se comprende
el nacimiento del día.

Y es que lo que ocurre, finalmente,
como decía en un inicio,
es que intentamos describir con sencillez
algo que en realidad no es simple.

Algo que no debe ser simple.

No le temas a esta verdad.

El verdadero mantra,
recuerda,
cambia día a día.

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