viernes, 6 de abril de 2018

Un hombre en el techo de una casa.


Veo un hombre.

Veo un hombre sentado.

Veo un hombre sentado en una casa.

Veo un hombre sentado en el techo de una casa.


Ha llevado un sillón hasta allá.

Ha llevado un sillón hasta allá arriba.

Ha llevado un sillón hasta allá arriba y se ha sentado.

Se ha sentado allá arriba, en el techo de una casa.


El hombre sentado lee un periódico.

El hombre sentado lee el periódico en su sillón.

El hombre sentado lee el periódico en su sillón, sobre el techo de una casa.

Tensa sus manos sobre el periódico, el hombre,  y parece temblar, al leerlo.


Debe existir una ciudad.

Debe existir una ciudad, pienso yo.

Debe existir una ciudad, pienso yo, donde los hombres se sienten sobre sus techos.

Tal vez todos los hombres llegan a esa ciudad en algún momento de sus vidas.


Antes de sentarse el hombre.

Antes de sentarse el hombre en su sillón.

Antes de sentarse el hombre en su sillón, ha botado la escalera.

No parece estar dispuesto a bajar aquel hombre, que está sentado sobre el techo.


Abajo en la casa hay luces.

Abajo en la casa hay luces que  se encienden.

Abajo en la casa hay luces que se encienden al escuchar el ruido.

No gritó, el hombre, pero su cabeza hizo un ruido seco, al golpear el piso.

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