lunes, 6 de febrero de 2017

Con quién te encuentras en la vida.

“WRGOABABD
WTBIMPANETP
MLIABOAIACQ
ITTMTSAMSTGAB”
T. S.

En la vida te encuentras con una serie de personas.

Y para el que quiera comprender en la palabra serie está la clave.

Un leñador, por ejemplo.

O un cuidador de caballos.

O hasta un empleado cualquiera de un barco a vapor.

Entonces hablas y escuchas historias.

Sus historias.

O una historia en realidad, varias veces.

Una historia entre los árboles.

Una historia entre los caballos.

Una historia en medio del mar.

Y crees entonces que eso es parte de la vida.

Que tiene un significado propio, me refiero.

Relativamente independiente.

Relativamente impersonal y hasta cierto, aquel significado.

Te encontrarás con algunos, incluso, que reconocerán en ellos, un amigo un común.

Ya sabes… un tipo que vieron en algún lugar.

Un hombre cualquiera que visita lavanderías.

O alguien que guarda cigarrillos caros en cajetillas económicas, quién sabe con qué objeto.

Cómo sea, gente que hoy, sin duda, está muerta.

Con un papel en un bolsillo.

Con un bolso marrón olvidado en alguna parte.

O con una especie de clave para acceder a un significado que finalmente se perderá.

Cosas que poco importan, en realidad.

Lo que te parecerá importante en cambio, será hablar (o evitar hablar), de tu propia muerte.

Y es que ellos mirarán tu muerte y reconocerán tu cuerpo.

Y no habrá dudas y todo será claro, aparentemente.

Como si un nombre aclarase todo.

Como si ellos realmente te reconocieran a ti, al identificar tu muerte.

¿No lo entiendes?

Nada está nunca terminado.

En lo tachado está el enigma.

Y para el que quiera comprender en la palabra muerte –y no vida-, está la clave.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores

Archivo del blog

Datos personales