miércoles, 6 de abril de 2016

Lágrimas artificiales.


Ahora las venden en el metro.

Directo desde importadora Latinoamericana.

Y es que ya no traen cortaúñas, ni cepillos de dientes, ni tijeras peluqueras.

Ahora lo que se vende son las lágrimas artificiales.

Nunca más los ojos secos.

Nunca más una expresión de afecto sin una correcta humectación ocular.

Ustedes ya saben, solo un cuarto del precio al que están en el mercado.

Las mismas que ve en la tele ahora están aquí para usted.

No pierda la oportunidad.

No permita que duden de su mundo interior.

Que nadie cuestione la profundidad de sus emociones.

Aproveche esta gran oportunidad.

Y claro, como se trata de una oferta esta vez podrá llevar también:

Una sonrisa artificial.

Un gesto de dolor semiauténtico.

Todo un frasco de esencia de humanidad, de la misma marca que hoy es furor en el mercado.

No dejen pasar esta oferta.

Esto es algo que no se repetirá.

No desestime sus ventajas:

Confiese su infidelidad con lágrimas artificiales y ya verá cómo lo perdonan.

Diez gotitas y vaya a pedir su aumento de sueldo.

Úselas para orar, incluso, ya que nadie puede estar atento a cada instante.

Haga el cálculo y estime su ahorro.

Lágrimas artificiales.

Directo desde importadora Latinoamericana.

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