“La
vida no es forma de tratar a un animal”
K. V.
Era un perro chistoso.
Cuando estaba alegre movía una pata, rápidamente, en
vez de mover la cola.
La familia lo mostraba a todos y siempre alegraba
el momento.
Esa sí que era una alegría contagiosa.
Entonces lo grabaron en video y lo subieron a
youtube.
Le pusieron músicas variadas y con cada una el
perro parecía ir a ritmo.
Eso hasta que en uno de los comentarios un
veterinario habló de una patología grave.
Luego se sumó otro.
Y entonces no faltaron quienes dijeron fijarse en
la cara del perro y decir que en realidad estaba triste.
Y claro, surgieron videos de acercamiento a la cara
del perro y realmente se veía triste.
Entonces pusieron música triste a esos videos y los
subieron también a youtube.
Y las canciones hablaban de seguir bailando, aunque
nos doliera el mundo.
Y hasta hicieron un montaje con el perro sobre el
Titanic, mientras se hundía.
Y de vez en cuando en los comentarios algún veterinario volvía a
discutir sobre la patología, hasta que el asunto llegó a la tv.
A un matinal, durante unos minutos, en el que
contactaron con la familia dueña del perro.
Contaron que ya hacía un mes que el perro había
muerto, de un ataque.
Y dijeron que mientras moría, seguía moviendo una
pata.
Luego de esto en el matinal repitieron la actuación
de un humorista en un festival de verano.
Todos reían y al parecer el espacio tenía gran audiencia.
Esa sí que era una alegría contagiosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario