Una vez al día.

Me pasa siempre una vez al día. De improviso eso sí, y nunca en los mismos horarios.

Generalmente me doy cuenta al enfrentarme a algún texto escrito, pues la manifestación de aquello que ocurre es más fácil de identificar de esa forma.

Así, para explicarme, puedo decir que al abrir un libro, por ejemplo, veo letras. Quizá suene como algo obvio, pero lo cierto es que solo veo letras.

Nada de palabras, me refiero… nada de significado... Solo letras. Dibujos de letras, incluso pues ni siquiera soy capaz, en ese momento, de reconocer qué letra es cada una…

Una vez se lo explicaba a un médico diciéndole que era como ver un alfabeto muy extraño, pero creo que incluso se trata de una situación más lejana al significado… pues no soy capaz de reconocer relación alguna entre aquellas letras…

Con todo, no me gusta resumir diciendo que lo que me pasa sea un problema con los textos escritos… Por eso decía antes que esa es solo una manifestación de algo que me ocurre que va más allá de simplemente la desarticulación de un texto.

Lo que creo, en cambio, es que se trata de una desarticulación mayor. Una incapacidad para encontrar significados en algunas estructuras que lo poseen.

Con esto, me refiero a que algo similar a lo que me ocurre con las palabras me ocurre también con la música, los objetos y hasta con la gente… cuyas acciones se ven entonces inconexas y solo me parecen extraños movimientos de unos animales con ropa que se cruzan en mi ángulo de visión…

Recuerdo que tras un par de visitas con el médico y un par de electroencefalogramas y algunas pruebas que decían relación con el monitoreo durante el sueño… él me preguntó directamente si ese momento diario era o no algo que realmente me incomodara.

Y claro… yo recuerdo haberlo pensado y haber concluido que no. Y de hecho, pensé entonces, puede que hasta se trate de un hecho esencial. Necesario.

No creo, por cierto, haberme distanciado mucho de esa conclusión, con el paso del tiempo.

Respecto a la naturaleza de la necesidad, sin embargo, que esa situación viene a cubrir, me permito guardar, por el momento, un profundo y también necesario silencio.