Hicimos una ciudad con palitos de fósforos.
Bueno, en realidad, hicimos la representación de
una ciudad.
Casas, edificios, iglesias… todo lo hicimos
preocupándonos de usar ese único material de construcción.
Fue todo un año de trabajo.
Se supone que nos fortalecería como equipo además
que se trataba de un trabajo que podía ser abordado, según decían, transversalmente.
En principio avanzamos de forma independiente, cada
uno fabricando algo y luego simplemente reuniendo lo creado.
Sin embargo, con el tiempo surgieron unos problemas
con la escala de algunos edificios y debimos organizarnos mejor, al mismo
tiempo que debimos calcular la cantidad de casas y barrios necesarios para que
funcionara una ciudad de ese tamaño.
Fuimos trasladando entonces, lo fabricado, a una
sala abandonada que vaciamos totalmente y ubicando cada uno de nuestros
edificios en un espacio determinado.
De hecho, ya hacia el final de aquel año, debimos
planificar incluso la forma de entrar a ese lugar. Qué edificios debíamos mover
para poder dar unos pasos, incluso, a la hora de completar nuestra ciudad.
Mientras se terminaba, algunos creamos la historia
de la ciudad, otros hicieron el estudio de los diversos servicios que prestaba
y hasta hubo quienes hicieron proyecciones demográficas demostrando de qué
manera debía seguir creciendo aquel lugar, y qué tipo de construcciones
necesitaba.
Llegó así el final de aquel año y fueron hasta de
un canal de tv para filmar nuestra ciudad.
Recuerdo que hicimos una fiesta ese día, para
celebrar nuestro trabajo.
Esa misma noche, lamentablemente, uno de los que participaron
en la creación de esa ciudad se suicidó, por temas familiares, principalmente,
totalmente ajenos a nuestro trabajo.
Debido a esto, la noticia de nuestro proyecto se
vio opacada por esa otra tragedia.
Poco tiempo después, según recuerdo, la ciudad que
habíamos construido fue encontrada totalmente destruida.
Bueno, la representación de una ciudad, digamos.
Así que no fue tan grave.
No hay comentarios:
Publicar un comentario