jueves, 24 de abril de 2025

Me mandan a comprar y olvido qué.


“Y él, que no sabía su nombre, lo adivina y dice
que se llamaba Perceval el Gales,
y no sabe si dice verdad o no;
pero decía la verdad, aunque no lo sabía.”
Ch. de T.


Me mandan a comprar y olvidó qué.

Pero como estoy en la panadería, intento imaginarlo.

Observo qué productos tienen, descarto algunas cosas y cuento el dinero que llevo.

Entonces hago cálculos.

E infiero.

Por lo general estoy pensando en eso cuando me tocan el hombro para que pida de una vez.

Lo hacen de buena forma, en todo caso, pero siempre me sorprende.

A veces quién vende me llama por mi nombre.

Y claro, como no lo recuerdo, hasta mi nombre me confunde.

Después de todo son palabras, apenas, como cualquier otra.

Hay veces, incluso, que no he pedido nada, y me venden igualmente.

Eso lo recuerdo ahora, por cierto.

Apenas ahora, quiero decir.

Basta con extender la mano y ellos toman el dinero y luego me entregan una bolsa con lo que dicen que yo necesito.

Luego, claro está, regreso a casa.

Dejo la bolsa sobre la mesa y saco lo que haya traído dentro.

Entonces intento convencerme que eso, justamente, es lo que necesito.

Me gusta pensarlo así, aunque pocas veces funcione.

Podría detallar un poco esto, y mencionar algunas dificultades.

Errores de cálculo.

O incongruencias, más bien.

Por ejemplo, podría mencionar que en casa, suele sobrar pan.

Tal vez, me digo, ya no vive aquí la gente que recuerdo.

Y claro, una sensación parecida al hambre, vuelve a instalarse en esos casos.

En uno, me refiero, vuelve a instalarse.

Como si fuese otro estómago, el corazón.

Y de vez en cuando sonara.

Lo que pasa es que siempre decimos la verdad, aunque no sabemos, me digo.

O lo leo, tal vez, pues descubro está escrito sobre la mesa.

En voz alta, lo leo.

Probablemente lo escribí yo.

O alguien, al menos, como yo.

Un alguien con otro nombre, quiero decir, pero con necesidades similares.

Gente con varios estómagos, como las vacas.

Y que no saben, ciertamente, lo que son.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores

Archivo del blog

Datos personales