I.
Alguien en un cómic -creo que en un número especial escrito por Peter David-, le grita a Hulk diciéndole que en realidad no existe.
Que es apenas una emoción.
O peor aún, un estado mental.
II.
No solo Hulk, pienso entonces, mientras leo.
Sin emoción ni sorpresa, lo pienso.
Luego, simplemente, sigo con la lectura.
Podría decirse que sigo, incluso, sin experimentar cambio alguno si me comparo con el yo de antes de pensar.
Es extraño que llamemos pensar a esto, me digo.
A esto que no nos afecta.
El ser que confronta a Hulk, por cierto, es nombrado como "Fragmento".
III.
Miento.
No mucho, pero sí.
Lo que quiero decir -o corregir, en realidad-, es que no leo, en este instante.
Más bien recuerdo -y no sé por qué-, el extraño enfrentamiento de Hulk, contra Fragmento.
Una que otra viñeta, es lo que recuerdo.
Un poco borroso, incluso.
Un jeep volcado que al final no se volcó, por ejemplo.
O que no se volcó totalmente.
IV.
Un estado mental, pienso ahora.
Y repaso la frase como si fuese una cifra.
No es tan poco, como parece.
Y es que Banner ni eso, si somos honestos.
No da ni para incógnita.
Ni para fragmento de incógnita, incluso, probablemente alcance.
Tampoco para voltear un jeep.
Nadie compra poleras del doctor Banner, quiero decir.
Es tibio como un cero.
Transparente casi, como la última línea de este escrito.
s .
No hay comentarios:
Publicar un comentario