Un hombre robot
en Ámsterdam
vende semillas
de flores.
Lo encuentras
en el aeropuerto
o en otros
sitios
donde suelen pasar
los turistas.
Tiene gran
variedad de semillas,
por supuesto,
y te entrega información
de cada una de ellas,
si así lo
solicitas.
Las semillas
vienen en sobres de colores,
con un código
impreso que puedes escanear,
para saber los
cuidados que debes tener
y cómo crecerá
cada una de ellas.
El hombre robot
de Ámsterdam
tiene una voz
amable
y su apariencia
es muy cuidada
por lo que
siempre ves a algún turista
sacándose una
foto con él.
Por otro lado,
al aceptar
distintas monedas
y sistemas de
pago
las ventas de
este hombre robot
son muy masivas
y se calcula
que sus sobres con semillas
son hoy en día
uno de los
souvenirs
más vendidos en
Ámsterdam.
Girasoles,
amapolas y tulipanes
están entre las
flores más vendidas,
aunque en
realidad muchos de quienes compran
no se fijan
mucho
en el tipo de semillas
que seleccionan.
De hecho, según
estudios,
se estima que
solo el 3% de los turistas
que compran
semillas al hombre robot
terminan plantándolas.
Y de ese 3%,
por cierto,
no se tienen
datos ciertos,
sobre cuántas
flores podrían haber germinado
finalmente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario