Miento un poco.
Es decir, no miro los dientes,
pero los palpo.
Voy de caballo en caballo
hasta detenerme en uno.
Y es que de una forma extraña
e indolora
-o prácticamente indolora-,
ese caballo me mordió.
Entonces me detengo
y nos miramos.
Poco después me subo.
Él no me quiere arriba,
pienso.
Me bajo.
Nos miramos.
No sé por qué,
pero entonces algo me impulsó
a liberar ese caballo.
O sea,
le quité las riendas.
Lo solté.
Seguramente van a ir a buscarte
y será peor,
le dije.
Él me miro, simplemente.
Seguro.
Yo soy libre,
dijo entonces, finalmente.
Y por cierto,
agregó,
esto es hermoso,
pero tampoco es tu sitio.
"esto es hermoso,
ResponderEliminarpero tampoco es tu sitio"
.... bello
(Escribí bello, pero quise decir potente o llegador)
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